Que importante esto, que uno de los equipos que mejor juega en el fútbol argentino, cambie radicalmente su manera de afrontar un juego, porque debe tratar de parar las individualidades del conjunto de Zielinski, sabiendo que no puede equivocarse ni distraerse porque Belgrano te lo hace pagar muy caro.
El partido fue muy parejo y el 0 a 0 le quedó bien, los dos contaron con situaciones para abrir el marcador pero la buena noche de los arqueros dejaron vírgenes a las redes del Kempes el miércoles.
Jugó bien el Pirata, sigue siendo de los equipos más ordenados que hay, se notó la ausencia de Ribair en el medio, pero jugó un gran partido Farré, desdoblando su función entre organizador y recuperador de pelotas. Muy bien Olave, que sigue sacando pocas por partido, pero son esas que valen los puntos que defiende el equipo.
Del arbitraje la verdad no vale ni el tiempo de pensar como calificar al mamarracho de Lunati, prepotente, incompetente, que dejó pegar en demasía a ambos equipos, y sin lugar a duda se comió un penal a favor de Belgrano como mínimo.
Es un buen empate, ante un rival de los más difíciles, sigue en la senda del buen juego el Celeste que este domingo debe aprovechar el mal momento del Pincha.